Al ver que tu entrada iba de fútbol, he pensado dar media vuelta y volverme por donde había llegado.
Pero luego he visto tu casa tan vacía que no he podido reprimir , esta necesidad incesante de parloteo que tengo, y aun cuando ya te digo que odio con todas mis fuerzas el fútbol, me he tragado casi enterita, la entrada que enlazas.
Que sorprendentemente me ha encantado, al ver que ponen verde al tal Florentino nuevo rico donde los haya, y que además critican la locura en la que se está convirtiendo este deporte, que cada vez es menos deporte y es nada.
Que más parece una exhibición de poderío, derroche de descerebrados, disculpa constante para que la gente enloquezca y olvide en las gradas sus penurias, en fin, un asco.
Que me he decidido a aburrirte un pelín, con mis "baralladas" ( que se dice en galego) esperando que pronto tengas tu casa llena y que no seas excesivamente crítico con mis deslices lingüísticos, ortográficos, de estilo y demás cuestiones técnicas que domináis otros.
Lo cierto es que yo no pretendía hablar de fútbol. Me resulta grotesca la manipulación de ciertos partidos políticos pretendiendo hacer cuestión política del asunto –el ramalazo totalitario se les nota enseguida. Y, bueno, las manifestaciones del otro elemento hablando de ” imperialismo” , y otras sandeces, pertenece al género del sainete político para oligofrénicos. Por no hablar de las portadas con la Paris Hilton, ¡dios mío!, que les den un periódico para eso...
Pero gracias por tu comentario.. y por darle vida a esta casa.
El problema de la gente profunda, es que siempre suponeis que el cerebro del resto de los mortales, bucea como el vuestro y malamente nadamos en la superficie. Ese matiz político yo no lo veía, pero también es verdad que desconozco absolutamente el tema. Respecto de las penosas portadas con las que los periódicos y revistas pretenden enganchar más lectores, estoy contigo. Al final, si te das cuenta, en el periodismo ocurre como en la educación, lo importante no es informar o editar buenos artículos, igual que en educación no es enseñar y formar. Lo importante para ellos es llamar la atención, dar carnaza y entretener a los parroquianos, a cuantos más mejor, aunque al final, sean todos una pandilla de descerebrados.
A algunos les dan una cátedra para exactamente lo mismo. Y otros pillan la tiza y la pizarra, y sin cátedra ni ná, se dedican a ParisHiltonearse delante del auditorio y ParisHiltonear al mismo auditorio pensando que los que les escuchan no tienen dos dedos de frente y no se enteran (o que todos tienen la misma frivolidad metida en el cuerpo y buscan exactamente la misma cosa.)
Es el juego de la comunicasao, corasao. El de la interpretación del otro, como siempre, libre y voluntaria. Si no tuviera tantas consecuencias nefastas no merecería la pena el comentario.
5 comentarios:
Serenus,
Al ver que tu entrada iba de fútbol, he pensado dar media vuelta y volverme por donde había llegado.
Pero luego he visto tu casa tan vacía que no he podido reprimir , esta necesidad incesante de parloteo que tengo, y aun cuando ya te digo que odio con todas mis fuerzas el fútbol, me he tragado casi enterita, la entrada que enlazas.
Que sorprendentemente me ha encantado, al ver que ponen verde al tal Florentino nuevo rico donde los haya, y que además critican la locura en la que se está convirtiendo este deporte, que cada vez es menos deporte y es nada.
Que más parece una exhibición de poderío, derroche de descerebrados, disculpa constante para que la gente enloquezca y olvide en las gradas sus penurias, en fin, un asco.
Que me he decidido a aburrirte un pelín, con mis "baralladas" ( que se dice en galego) esperando que pronto tengas tu casa llena y que no seas excesivamente crítico con mis deslices lingüísticos, ortográficos, de estilo y demás cuestiones técnicas que domináis otros.
Un abrazo.
María:
Lo cierto es que yo no pretendía hablar de fútbol. Me resulta grotesca la manipulación de ciertos partidos políticos pretendiendo hacer cuestión política del asunto –el ramalazo totalitario se les nota enseguida. Y, bueno, las manifestaciones del otro elemento hablando de ” imperialismo” , y otras sandeces, pertenece al género del sainete político para oligofrénicos. Por no hablar de las portadas con la Paris Hilton, ¡dios mío!, que les den un periódico para eso...
Pero gracias por tu comentario.. y por darle vida a esta casa.
Sabes Serenus,
El problema de la gente profunda, es que siempre suponeis que el cerebro del resto de los mortales, bucea como el vuestro y malamente nadamos en la superficie.
Ese matiz político yo no lo veía, pero también es verdad que desconozco absolutamente el tema. Respecto de las penosas portadas con las que los periódicos y revistas pretenden enganchar más lectores, estoy contigo.
Al final, si te das cuenta, en el periodismo ocurre como en la educación, lo importante no es informar o editar buenos artículos, igual que en educación no es enseñar y formar.
Lo importante para ellos es llamar la atención, dar carnaza y entretener a los parroquianos, a cuantos más mejor, aunque al final, sean todos una pandilla de descerebrados.
Un abrazo.
Que les den un periódico para eso... jeje.
A algunos les dan una cátedra para exactamente lo mismo. Y otros pillan la tiza y la pizarra, y sin cátedra ni ná, se dedican a ParisHiltonearse delante del auditorio y ParisHiltonear al mismo auditorio pensando que los que les escuchan no tienen dos dedos de frente y no se enteran (o que todos tienen la misma frivolidad metida en el cuerpo y buscan exactamente la misma cosa.)
Es el juego de la comunicasao, corasao. El de la interpretación del otro, como siempre, libre y voluntaria. Si no tuviera tantas consecuencias nefastas no merecería la pena el comentario.
Pero la merece.
La pena.
Anónima
Nunca fue pequeño el afán de ser fuente -o trasmisor- de noticias, pero el presente lo amplifica.
¡oh.. cómo llega el verano!
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