Recogemos hoy la culminación del artículo que comentamos en el último post:
“La caridad del estado y la limosna del desarrollo personal”
“La escuela es más que un proveedor de desarrollo personal: es un mecanismo de cohesión social”
A primera vista, como casi todo lo que sale de la mente/boca de los próceres de la pedagogía oficial, asemeja ser una verdad de Perogrullo, una simpleza elevada a dogma. Pero no, no es así: es la propagación con carácter pandémico de la verborrea oficial, que se ha convertido en segunda naturaleza de nuestro sistema de enseñanza, lo que nos imposibilita reparar en la iniquidad esencial a muchos de estos discursos, (propiedad que le salta la vista a cualquier anacoreta) que, por cierto, van camino de convertir -los discursitos, no los anacoretas- nuestra enseñanza en una escombrera... y aunque uno no es precisamente un meapilas, justo es reconocer la verdad de aquel aserto: “por sus obras los conoceréis”. Pero dejemos las obras y volvamos a las nada inocentes palabras; pues como quien no quiere la cosa al desarrollo personal se le añade aparte , como algo de naturaleza diferente -y casi antitético-, el colofón de la cohesión social, como quien pone la guinda en un pastel de merengue. Y uno lo lee y se queda tan tranquilo.
Pero veamos, ¿de dónde procede la cohesión social?. Me parece que de aquello que fomenta el desarrollo personal; de la ciencia, de la literatura, del arte. De la racionalidad y la cultura, en suma, y no de ideología barata.
¡Ay! ¡Cuánta necesidad tenemos los ciudadanos y la ciudad, de los bosques, de los ermitaños, de los solitarios... y hasta de los salteadores de caminos!
11 comentarios:
Me ha gustado mucho eso de "la verborrea oficial...nos imposibilita reparar en la iniquidad esencial a muchos de estos discursos, (propiedad que le salta la vista a cualquier anacoreta)"
No hace falta ser un anacoreta en sentido estricto, pero sí desconectarse de la TV y tomar los medios en dosis homeopáticas, hacer una cura de desintoxicación de la infosfera oficial, para poder ver las cosas como son.
Entonces, con los oídos sanos, es cuando estas cosas chirrían. Su falsedad se hace casi evidente por el chirrido.
Pseudópodo:
¡Y qué bien se respira además!.
Pues, no solo el oído, también el olfato lo agradece. Y claro los pulmones... etc
Estoy de acuerdo con vosotros. Evitar la verborrea oficial nos regenera los sentidos. El tener que tragar a estas alturas con afirmaciones del tipo: "la escuela es un proveedor de desarrollo personal", "la escuela es un mecanismo de cohesión social", "escuela impregnada de su espíritu" ("impregnada de su espíritu", ¡vaya mierda!), "la ofensiva del ultraconservadurismo contra la Educación para..." (¡cómo si se tratase de una nueva cutre Cruzada, y como si el curato fuese el único que se ha manifestado contra el bodrio!), "educación social atribuida a la escuela", etc. El artículo de este sociólogo orgánico no tiene desperdicio: un acopio de todos los tópicos del neosocialismo pedagógico puestos como dogmas más allá de cualquier mínima sensatez y de la más simple conciencia de la realidad. Un banderín de enganche, como la mayor parte de los artículos sobre educación de EL PAÍS. Sin un atisbo de agudeza o reflexión. Los filólogos y los sociólogos orgánicos nos están quemando las naves. Escribo una entrada en mi blog que se va a titular "El tonto impune". Podemos comentarla. Un saludo a los dos.
Espero leer pronto la entrada de la que hablas en tu blog. Habrá que ir creando opinión, aunque seamos poquitos.
Saludos y gracias por tus comentarios
Queridos contertulios:
ya publiqué la entrada que prometía. Se llama: El "tonto impune": hacia un nuevo éthos educativo.
Ya me contaréis que os parece.
Un saludo.
Estos días se ha hecho público un manifiesto pedagógico, redactado por el lobby más poderoso en la educación en España, para negar que en la escuela se hayan rebajado los niveles de exigencia, ni que se hayan hundido los contenidos, ni que los alumnos actuales sean más difíciles. El problema, según ellos, es que no les entendemos, ni adaptamos el saber a sus circunstancias porque utilizamos métodos obsoletos. Cuando leo esto, dada la conversión de la escuela en un parque temático de ocio y entretenimiento, se me encienden los ánimos. Entiendo ahora tu argumentación sobre esa citada cohesión social defendida por los pedagogos de turno. No escuela para el conocimiento científico y humanístico, sino para la cohesión social. Ya. Desgraciadamente quien quiera que la escuela sea otra cosa que ese instrumento de cohesión social ha de huir de ella y pagar grandes cantidades.
Pues habrá que insistir Joselu, habrá que decir lo que se piensa, denunciar manifiestos como el que comentas, no dar por buena la situación. Creo que si hemos llegado a esta situación es en parte porque la hemos dado por buena o por ineludible. Al menos es cuanto a mí se me ocurre que podemos hacer. Aunqque sabemos de la situación de inferioridad frente a medios como El País.. y otros. Pero intentemos al menos conservar la lucidez.
Por cierto que Ricardo Moreno el autor del "Panfleto antipedagógico" ha publicado un nuevo libro "De la buena y de la mala educación" ( creo que ese o parecido es el título) prologado por Eduardo Mendoza.
Quizá valga la pena leerlo y recomendarlo.
Un saludo Joselu.
¿Y qué es eso de "cohesión social"? La sociedad cohesionada sólo existe en la utopía negativa, en el sueño de la razón social-fascista, en los argumentos de los nuevos sacerdotes de la ignorancia. "Educación para la cohesión social", futura asignatura en el no-tan-futuro Bachillerato Obligatorio.
¿Es que todo el mundo ha perdido la puta cabeza?
Aquiles
Quizá los conozcáis, pero os sugiero dos posts donde se trataban estos temas:
El ocaso del conocimiento:
http://antesdelascenizas.blogspot.com/2008/04/2084-el-ocaso-del-conocimiento.html
2084-Expediente 34523. Emociones públicas-vicios privados.
http://antesdelascenizas.blogspot.com/search?q=expediente
Y con permiso de usted, Serenus, me tomo la libertad, además de aconsejarles a todos vivamente la lectura de los posts más arriba citados -yo los conocía y son fantásticos-, de presentarles una carta abierta a don Javier Orrico, publicada aquí:
http://candaya.blogspot.com/2008/11/carta-javier-orrico.html
Un saludo,
Aquiles
Aquiles
EStoy de acuerdo contigo Aquiles en que no solo es lamentable la altura política de nuestros partidos, sino que esto solo puede explicarse desde la ignorancia política del resto de ciudadanos.
Asignaturas como la Epc no creo que vengan a remediar esta situación sino más bien a cronificar el orden de los prejucios.
Saludos Aquiles, gracias por tus aportaciones y por tus eruditas consideraciones.
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