domingo, 5 de octubre de 2008

Hamburgo.


Ciudad
ya tan lejana!

Lejana junto al mar: tardes de puerto
y desamparo errante de los muelles.
Se obstinarán crecientes las mareas
por las horas de allá.

Y serán un rumor,
un pálpito que puja endormeciéndose:
cuando asoman las luces de la noche
sobre el mar.

Más, cada vez más honda
conmigo vas, ciudad,
como un amor hundido,
irreparable.

A veces ola y otra vez silencio.

Jaime Gil de Biedma.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Los amores hundidos como los barcos hundidos sirven de lecho a los náufragos.

Pdt.- Agradecido te estoy Serenus Zeitbloom por colocar mi 'blog' entre tus enlaces. Generosidad a la que respondo con un vínculo de tu 'blog' entre los míos.

Recibe un saludo cordial.

Serenus Zeitbloom dijo...

¿es eso un ejemplo del clientelismo del que hablabas en alguno de tus posts?

Saludos.

Pasan las aves
.....
......
y sobre
la línea y las espumas
de la costa
los pájaros que

cambian de planeta
llenan
el mar
con su silencio de alas.

Pablo Neruda

uno de mis fragmentos poéticos preferidos.